El Jardín de Gestalt

Crecer es ser capaz de abordar problemas más complejos

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Cuando empecé en la universidad, ¡mi vida era mucho más simple que ahora!

Mi trabajo, como estudiante, era aprobar cuatro o cinco asignaturas por semestre. Aún así, me sentía desbordado, al límite de mi capacidad para:

Tampoco es algo que ahora me sorprenda. En aquella época, no utilizaba agenda, ni listas de tareas, y mis apuntes eran lamentables o, en el mejor de los casos, estaban incompletos.

A efectos prácticos, todo lo hacía «de cabeza»: ¡normal que siempre me sintiese al límite!

Desde aquellos primeros años en la universidad, por suerte, he mejorado.

Por ejemplo, ahora utilizo la metodología Getting Things Done para gestionar mis tareas. Gracias a esta metodología puedo gestionar cantidades mucho mayores de tareas con diferentes tipos de importancia, urgencia y deadlines.

Es una capacidad que, ahora, doy por sentada en mi vida.

Tanto es así, que me parece ridículo que mi “yo” del pasado sufriese estrés en la universidad con las 20 o 30 tareas que pudiese tener abiertas en un momento dado. A día de hoy, tengo más de 250 tareas pendientes, y esto no me provoca ningún estrés o problema: puedo mantener el orden perfectamente.

¿Cuál es el truco de la metodología Get Things Done?

No gestionar tus tareas «de cabeza».

La idea central de Getting Things Done es vaciar tu cabeza de toda la información relacionada con tus tareas. De esta forma, pasas a gestionar esta información por escrito usando listas y calendarios de forma sistemática.

En este sentido, Get Things Done me soluciona el problema de cómo gestionar y poner orden a las tareas pendientes en mi vida.

…pero la universidad no consistía solo en hacer organizar y cumplir tareas.

También había otro factor en juego: aprender ideas nuevas.

Escribir notas es una ayuda para aprender

Una de las mejores formas para aprender ideas nuevas es escribir: tomar notas de aquello que quieres aprender.

Es por esto que recomiendan tanto tomar apuntes en clase.

El problema es que «tomar notas de forma normal» sufre del mismo problema que «organizar tus tareas de cabeza»: en ambos casos existe un límite máximo de complejidad que puedes llegar a gestionar.

Mis apuntes en la universidad

¿Sabéis por qué mis apuntes en la universidad eran lamentables?

No me malinterpretéis, yo me tomaba muy en serio lo de tomar apuntes en clase; de hecho, lo normal era que con cada lección llenase tres o cuatro hojas de apuntes.

Mi problema es que no podía gestionar tanta cantidad de apuntes de forma eficiente. Había un punto —a mitad del semestre— donde mis apuntes simplemente degeneraban en el caos casi absoluto. Volviéndose inútiles.

Me resultaba casi imposible:

Es por esto que en la universidad me centré en ser capaz de aprender sin depender de mis apuntes.

Aún así, yo seguía tomando apuntes en clase porque me ayudaba a estar centrado y a prestar atención y, de forma esporádica, mis apuntes podían ayudarme a recordar alguna idea, pero no para mucho más.

Tomar notas de forma normal escala mal con la complejidad

En resumen, si tomas notas de forma normal, tus notas pueden degenerar rápidamente en un caos inútil cuando aumente la cantidad:

O, en otras palabras, tomar notas de forma normal escala mal con la complejidad.

Zettelkasten sí que escala bien con la complejidad

Hace relativamente poco, cuando me faltaba solo unos seis meses para acabar mi doctorado, descubrí una metodología para tomar notas de forma sistemática: Zettelkasten.

Si Get Things Done te soluciona el problema de cómo gestionar y organizar tus tareas, Zettelkasten soluciona el problema de cómo gestionar y organizar tus notas.

La promesa de Zettelkasten es que será una ayuda para…

Desde mi experiencia personal, puedo afirmar que es así.

Mis apuntes (ahora del trabajo) ya no degeneran al caos y noto como esta vez sí que son una herramienta fundamental que potencia mi aprendizaje.

Conclusión: busca herramientas para abordar problemas más complejos

Las dos metodologías que os he mostrado (Get Things Done y Zettelkasten) tienen un objetivo en común: aumentar la complejidad que puedes gestionar de forma eficiente.

O, en otras palabras, te permiten abordar problemas más complejos.

Desde que empecé en la universidad, he cambiado en muchos aspectos. Pero el elemento que siento que ha sido el más crucial y diferenciador en mi vida ha sido: encontrar herramientas para gestionar problemas más complejos.

Si pudiese volver al pasado, para hablar con mi “yo” de la universidad, sin duda le recomendaría que aprendiese sobre Getting Things Done y Zettelkasten.

Pero, como no puedo hacer eso, te lo recomiendo a ti que estás leyendo estas palabras :^)

Y tú, ¿qué estrategias has encontrado para abordar problemas más complejos?


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