Usa herramientas que potencien la mentalidad adecuada
#Productividad
¿Tus herramientas te hacen más responsable… o más exigente?
Las herramientas potencian nuestras capacidades, ya sean físicas o mentales. Sin embargo, no son neutrales. Las herramientas también influyen en la mentalidad desde la que trabajamos.
Por ejemplo, un horario es una herramienta que potencia tu capacidad de planificar tu tiempo. Pero también puede fomentar dos mentalidades muy distintas:
- Una mentalidad de responsabilidad, que te ayude a cumplir tus objetivos sin estrés.
- Una mentalidad de exigencia, que te haga sentir culpa o frustración si no cumples el plan al pie de la letra.
En otras palabras, una buena herramienta puede ser contraproducente si potencia en ti una mentalidad inadecuada. Si ya eres muy exigente, lo último que necesitas es una herramienta que potencie aún más esa exigencia.
Por eso, cada vez que uses una herramienta, hazte estas dos preguntas:
- ¿Qué mentalidad (consciente o inconscientemente) estoy potenciando con esta herramienta?
- ¿Es la mentalidad adecuada para esta situación?
Una vez le recomendé a un compañero de trabajo que probase la planificación diaria (hacer un plan sobre cómo afrontar cada día). En mi experiencia, es una herramienta muy valiosa porque fomenta la proactividad, la responsabilidad y la flexibilidad. Sin embargo, en su caso no funcionó: le parecía una pérdida de tiempo y la sensación de “no cumplir el plan” le resultaba demasiado dura a nivel emocional.
El problema no estaba en la herramienta, sino en la mentalidad: estaba usando esa herramienta para potenciar su exigencia. Y desde ahí, planificar no solo no le ayudaba, sino que era contraproducente. Por tanto, antes de poder beneficiarse de este tipo de planificación, primero tenía que trabajar en su mentalidad: pasar de la exigencia a la responsabilidad.
Y tú, ¿qué mentalidad estás potenciando con tus herramientas?
Un saludo,
Fernando Nóbel